

Toma Nota - 2021
Las vías de transmisión del VIH son tres únicamente: Vía Sexual, Vía Perinatal y Vía Sanguínea.
Es llamada así porque se da mediante relaciones sexuales sin protección, es decir, sin el uso adecuado de un condón (masculino o femenino) con una persona que vive con VIH (se le conoce como persona portadora o persona con vih).
Cuando nos referimos a relaciones sexuales es necesario aclarar que se puede adquirir VIH por medio de relaciones sexuales vaginales, anales u orales, siempre que haya penetración o contacto de los fluidos ya mencionados con alguna herida abierta que esté produciendo o no sangrado.
La vía sexual es la más común por la cual las personas han adquirido VIH.
Esta vía de transmisión se da de una mujer embarazada que vive con VIH a su hijo o hija al momento del parto. La transmisión se puede producir en tres momentos:
Otra orientación que se da a las mujeres embarazadas que son VIH es iniciar a tomar su Tratamiento Antirretroviral (TAR) al tercer mes de embarazo.
Sucede cuando se penetra la piel por medio de una aguja u otros instrumentos no esterilizados y éstos contienen sangre de una persona que vive con VIH. Por ejemplo, en el intercambio de instrumentos utilizados para el consumo de drogas inyectables, la realización de tatuajes con instrumentos no esterilizados o desechables; transfusiones de sangre siendo esta un fluido que contiene VIH.
Hay muchas personas que piensan: “A mí no me va dar el Sida porque estoy casado/a” “Yo me salvo porque sólo tengo relaciones sexuales con mi esposo/a”.
Lamentablemente, no hemos aprendido bien que nadie tiene la responsabilidad de cuidar nuestro cuerpo más que nosotros mismos. Somos nosotros los responsables de nuestros propios actos y acciones. Aunque tengas esposo, esposa o pareja estable, eso no es una garantía ni inmunidad para no adquirir el VIH, ya que no sabes si tu pareja te es fiel.